La reina y la mendiga
comparten corazón
-casi lo saben-
La reina pide;
la mendiga, da
Las dos se asoman,
de vez en cuando,
al mismo viejo pozo
Se tocan con un dedo
lloran hasta la hiel
se ríen solas
cierran la misma puerta
y luego
La reina pide
la mendiga
da