Lo hondo,el centro mismo,
que no sabe la angustia de los huecos
te me nombra sin prisas
Terciopelo tuviera y te lo diera
¡ay , de la vez primera!
Lo hondo,el centro mismo,
que no sabe la angustia de los huecos
te me nombra sin prisas
Terciopelo tuviera y te lo diera
¡ay , de la vez primera!
Ser humano. Me repugnan los encurtidos y los deportes de riesgo. Escribo desde que puedo recordar. Vivo.
septiembre 10, 2007 en 9:02 pm
Estos poemas breves, aunque pulidos, tienen el aroma cálido de la pasión.
¿Dónde estabas?
Me gustaMe gusta
septiembre 11, 2007 en 8:12 am
En la vida, Colt, que ocupa demasiado. Pero sigo rumiando mi taracea. Algún día… algún día. Besos. Se os echa de menos, bloggers. I
Me gustaMe gusta
septiembre 13, 2007 en 6:01 am
Ya sé cómo nos dices, Iubira. Besos, y que sigas manteniendo una llamita encendida en el blog, hasta que el resto nos desperecemos de una vez…
Me gustaMe gusta